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EL FÚTBOL FEMENINO SIGUE ESPERANDO

Protocolos de protección en el fútbol femenino en Chile: a la espera de una respuesta

La desigualdad de género y el acoso ha marcado el desarrollo del fútbol femenino internacional, tras el beso sin consentimiento dado por Luis Rubiales a Jennifer Hermoso. Si bien, las autoridades chilenas relevantes en el área no se pronunciaron frente al grave suceso, cuentan con un protocolo para proteger a las jugadoras ante una situación de acoso, el cual se está aplicando en el caso del árbitro Franco Jiménez.

Por Valeria Pozo

El domingo 20 de agosto se realizó la final del Mundial Femenino de la FIFA, entre España e Inglaterra. El partido culminó con la victoria del equipo español 1 a 0, consagrándose campeonas de la edición 2023. Sin embargo, el primer triunfo de este equipo femenino estuvo marcado por un hito inesperado; un beso sin consentimiento propinado por Luis Rubiales —presidente de la Real Federación Española de Fútbol— a la delantera de la selección de España, Jennifer Hermoso, durante la premiación de las jugadoras.

Frente a esto, el Presidente de España, Pedro Sánchez, pidió la renuncia de Rubiales, quien rechazó rotundamente su dimisión voluntaria al señalar que fue un beso consentido, contradiciendo los hechos relatados por la jugadora. El caso quedó en manos de la FIFA, debido a la inexistencia de un protocolo interno que pueda dar respuesta a lo sucedido, cerrándose con la dimisión impuesta por el máximo órgano de autoridad del deporte, el pasado 25 de agosto. Pero ¿existen protocolos que protejan la integridad de las jugadoras de fútbol en Chile? ¿Hay casos actuales en los cuales estos protocolos puedan ser aplicados?

El caso de Chile

El 21 de julio del 2020, el Ministerio del Deporte aprobó el Decreto 22 que en su contenido determina un protocolo detallado sobre la prevención y sanción de conductas de acoso sexual, abuso sexual, discriminación y maltrato en la actividad deportiva nacional, es decir, en todos los deportes reconocidos en Chile. En este, se especifica que las instituciones nacionales de cada deporte son las encargadas de fiscalizar este tipo de conductas y no se diferencia por género u otras características, por lo que, en el caso del fútbol femenino, es responsabilidad de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP).

Para profundizar en ello, Deporte en Vivo se comunicó con la ANFP, pero esta se negó a emitir una opinión sobre lo ocurrido entre Hermoso y Rubiales. No obstante, aseguró que como institución están preparados para enfrentar este tipo de situaciones en el caso de ocurrir al interior de Chile.

El pasado 1 de mayo, el Sindicato de Árbitros llevó a cabo una fiesta en celebración de los trabajadores del rubro, la cual terminó en agresiones y una denuncia. Apenas el pasado 2 de agosto se conoció públicamente este suceso; una jueza del plantel de proyección del referido chileno interpuso una denuncia en contra del árbitro Franco Jiménez, por acoso de índole sexual. Los hechos aún son desconocidos, al igual que la identidad de la afectada.

Si bien, la denuncia fue hecha en la Comisión de Árbitros —como lo indica el protocolo— este la derivó al Oficial de Cumplimiento, Miguel Ángel Valdés, para iniciar una investigación, quien llevó el caso al Tribunal de Honor de la ANFP y a la Fiscalía, según lo detallado en el Decreto 22.

A la fecha, el caso no ha sido cerrado, pero el árbitro Franco Jiménez se encuentra suspendido de sus labores, las cuales apenas había comenzado a ejercer en abril del presente año.

Este no es un caso aislado. Ignacio Osvaldo Montano Guerrero, ex kinesiólogo del club Palestino, fue “funado” a través de redes sociales en 2019, por 16 jugadoras de fútbol de distintos clubes e independientes, todas menores de 18 años. Según relataron las víctimas al medio CIPER, Montano les tocó varías veces sus partes íntimas en sesiones con la excusa de ser parte del procedimiento, también las hacía realizar ejercicios desnudas o semidesnudas y les enviaba mensajes de connotación sexual. Si bien, Montano fue despedido del club, no se iniciaron medidas legales en su contra.

A pesar de que estos casos han sido en tiempos diferentes; la acusación al ex kinesiólogo de Palestino por acoso sexual en contra de jugadoras menores de 18 años, ocurrió antes de la creación del Decreto 22, y el caso de Franco Jiménez posterior a esta legislación, ambos registran una agresión en contra de mujeres. Esto, pone a prueba la eficacia del protocolo de prevención y sanción a conductas de acoso sexual, abuso sexual, discriminación y maltrato en la actividad deportiva nacional, precisamente en un contexto de relevancia frente a la respuesta de la FIFA en el caso de acoso sexual en contra de la delantera de la sección española, Jennifer Hermoso.

Si bien, el protocolo no determina un tiempo límite para dar respuesta a la denuncia, la apertura de una investigación y la suspensión de Franco Jiménez de sus actividades como árbitro, son una respuesta clave en retrospectiva a lo sucedido con el ex kinesiólogo de Palestino, Ignacio Montano, lo que puede ser un avance en materias de igualdad en las canchas y fuera de estas.

Foto: Club Palestino